¿Pueden ir de la mano?
Quizás se te ha pasado por la cabeza la idea de dejar tu trabajo para dedicarte a algo que te apasiona, has soñado con liberarte de la oficina y viajar por el mundo siendo nómada digital con tu trabajo en la mochila o simplemente lo único que quieres es trabajar desde la comodidad de tu casa o tu café favorito sin tener que rendirle cuentas a un jefe, madrugar, vestir formal y perder horas de tu vida transportandote a tu trabajo; pero no sabes por dónde empezar o cómo lograrlo.
No te preocupes, le sucede a muchas más personas de las que crees. Nosotras (Paula y Galy), también pasamos por ahí y sabemos la incertidumbre y el vacío existencial que se siente.
Es por esto que, en este artículo, quisimos compartir nuestras experiencias personales de armonizar la vida profesional y viajera, a través de nuestros hobbies, pasiones y talentos. Además de contarte cómo logramos llevar a cabo estos sueños de viajar y fundar nuestra propia empresa, así como lo que nos costó interna y externamente este proceso de transformación.
Queremos que ustedes también se animen a emprender, viajar, creer en sus talentos y vivir de ellos, sea cual sea que tengan. Así que, ¡empecemos!
Quienes somos, ¿cómo fundamos nuestra empresa y cómo empezamos a viajar?
Somos un par de amigas que se conocieron en un salón de clases de una facultad de Derecho en Bogotá, Colombia y que se convirtieron en colegas, socias y compañeras de viajes y aventuras.
En el 2015, cuando estábamos en nuestro 3er año de Derecho fundamos nuestra empresa: @casajuridica.ae, un bufete de #abogados e #inmobiliaria, buscando la tan anhelada libertad que deseábamos para recorrer el mundo y fotografiarlo, nuestras dos grandes #pasiones en común.
Los miedos y dudas que teníamos para ese momento eran enormes. ¿Cómo empezar a crear una empresa sin dinero y siendo estudiantes? Podríamos trabajar, estudiar y emprender ¿al tiempo?, ¿Cómo pagaríamos los #viajes?, ¿Quien iba a comprar nuestras fotos?, ¿Que iba a pensar nuestra familia y amigos de viajar sin fecha de regreso ni tiquete de vuelta?
Para esa misma época, y en nuestro afán de viajar nos presentamos a un concurso de Derecho Procesal de nuestra universidad, mediante el cual ganamos un viaje todo pago a la Ciudad de Medellín, Colombia. En dicho viaje nos hospedamos por primera vez en un hostel, tuvimos nuestro primer acercamiento al mundo de los viajes Low Cost y llegamos a nuestra ciudad de origen con la curiosidad del mundo activada.
Hoy (en el 2020) 4 años después, ella desde Bolivia y yo desde Bélgica ejercemos la profesión de abogadas a distancia, somos viajeras solitarias y contamos el #mundo a través de nuestro lente y con nuestros escritos.
Nuestro proceso de transformación de abogadas de oficina a viajeras nómadas digitales
Historia de Paula
Como esta foto (tomada hace 5 años) sería probablemente la clase de fotos que estaría publicando si no hubiese seguido mi corazón e instinto y no hubiese tomado la decisión de viajar hace 3 años.
Mi sueño antes de empezar a #viajar era ser magistrada de la Corte Constitucional de Colombia, mi entorno personal eran solo #abogados; mis hobbies eran comprar ropa de marca y salir a discotecas en el único día libre que tenía a la semana, el viernes, pero me sentía vacía y ahogada.
Sentía que tenía una presión social y personal inmensa, ya que crecí en el mundo de la política y lo jurídico, por mi familia (en especial por mi padre quien es un abogado prestigioso y profesor de la Universidad en la que estudié). Sentía que tenía que sonreír a gente que no me agradaba, vestir, comer y hablar bien todo el tiempo para impresionar y competir con otros abogados. Pero en el fondo esa no era yo, no me sentía cómoda, era una vida que no me pertenecía y lo peor de todo, no entendía porque sentía eso. Trabaje en varias firmas de abogados y empresas familiares hasta que me sentí saturada con trabajo a los 22 años.
En el 2016 realicé mi primer viaje como mochilera en solitario por Sudamérica sin ningún tipo de experiencia y con un presupuesto muy limitado.
Un viaje que me cambió la vida por completo, me volvió adicta a los viajes y me enseño como moverme por el mundo sin ser millonaria. Hasta el momento he recorrido 35 países, de los cuales 27 han sido viajando completamente sola. Después de este primer gran viaje, no pude volver a la rutina sin dejar de pensar en el próximo viaje; por lo que, me postule a una beca para hacer un intercambio en Brasil, lugar donde viví por 6 meses y desde el cual salte a un Eurotrip.
Después de ello estuve viajando por Norte América, Centro América, Europa, Colombia y finalmente en el 2019 me fuí a vivir Bélgica, lugar donde me encuentro radicada.
Actualmente trabajo como nómada digital por períodos como "freelance", como: blogger, escritora, copywriter, reportera de viajes, reviewer de hoteles, investigadora jurídica, traductora, profesora de idiomas, administradora de hoteles y estudio neerlandés (mi 7mo idioma).
Historia de Galy
Si estás leyendo esto, lo agradezco profundamente, por medio de este escrito, te quiero contar como le fuí quitando poder a todos mis miedos y le di un giro de 180° a mi vida, vamos pues, mi nombre es Galy, soy Colombiana, tengo 24 años, soy Abogada de Profesión y Fotógrafa por Pasión, librana, curiosa y viajera, este es un pedacito de mi historia, durante mis años de universidad me caracterice por realizar todo tipo de actividades académicas y laborales, mientras que estudiaba, trabajaba en una firma de abogados muy reconocida en mi país, adelantaba procesos en mi propia firma de abogados, concursaba representando a mi universidad a nivel nacional e internacional, pertenecía a dos grupos de investigación, compartía tiempo con mi familia, tenía mi pareja y un grupo de maravillosas personas a quienes llamar amigos.
Cuando me gradué, rápidamente me delegaron procesos judiciales y audiencias no solamente en Bogotá, también en otras ciudades (así que yo me encargaba de acomodar el itinerario de los tiquetes y esas escapaditas “laborales” me llenaban de felicidad e ilusión). Allí comenzaron mis choques de realidades, siempre tenía un viaje en mente, así fuera al pueblito más cercano, todo estaba bien, según mi percepción y según lo que esperaban y querían las personas más cercanas a mí.
Además, mi pasión siempre fue la fotografía, era mi manera de conectarme conmigo misma, amaba salir con mi cámara pero la verdad es que la mayoría del tiempo, mi cámara estaba debajo de la cama y nadie conocía mis fotos hasta el año 2017, yo solo las tomaba, las clasificaba y las guardaba en mi disco duro, en ese momento creía que si publicaba mi trabajo iba a parecer una abogada desenfocada de mi profesión (este y un sin número de miedo más me evitaban compartir mis fotos).
En un sin número de viajes sola, acompañada y como fuese, comencé a conocer mucha gente que me abrió mi perspectiva del mundo y comencé a entender lo que mi amiga Paula, me contaba, siento que allí comenzó mi proceso.
El viaje que me cambió la vida fue Costa Rica (lugar al que llegué para un Concurso de Derechos Humanos en la Corte Interamericana), comencé a chocar con otras realidades muy diferentes a la mía.
Y aunque viajaba e invertía mi tiempo y dinero en ello, siempre debía días de vacaciones en la oficina y comencé a ver que el dinero lo tenía pero lamentablemente el tiempo no.
Un viaje que implicaba renunciar a mi trabajo se me metió en la cabeza, pensaba en ello todo el tiempo y gracias a los consejos de mis amigos más cercanos y compañeros de trabajo, comencé a publicar mis fotos en instagram y paulatinamente deje de lado todos mis miedos pendejos y comencé a planificar en borrador lo que sería este viaje.
Conociendo viajeros, me di cuenta que habían muchas maneras de viajar y no precisamente con una cuenta millonaria en el banco, me di cuenta que si tenía tiempo, podría intercambiarlo por gastos fijos del viaje y así llegué al tema de los VOLUNTARIADOS, investigue diferentes plataformas, comencé a leer blogs de viajes y a ver videos motivacionales y no tienen idea cuánto me costó quitarle el poder al qué dirán. Ahora sonrió y veo con claridad lo bobita que fuí. ¿Pero saben? Si se puede.
¿Cómo así que no vas a iniciar la especialización?, ¿La maestría?, ¿Renunciar al trabajo con lo difícil que está conseguir uno?, ¿Viajar sola?, Galy pero si tu ni siquiera sabes cocinar - me decía mi gente cercana, yo solo sonreía y decía, bueno, ya veremos, en esta vida hay tiempo para todo y las cosas se pueden aprender y efectivamente, ahora, soy mi propia master chef.
La cuestión es que yo ya había colocado fecha de renuncia, sabía que haría un viaje de 6 meses a Perú, que si estaba cometiendo un error monumental en mi vida, me lo iba a permitir y que me valía mierda lo que dijeran los demás. Después de esa seguridad ya solo quedó planificarse financieramente.
Así fue que un 5 de agosto de 2019 emprendí este viaje detrás de un voluntariado con Ballenas Jorobadas al norte de Perú, fue el primer paso de una serie de sucesos que me han cambiado la vida y si estuve 6 meses en Perú, pero decidí extenderlo, actualmente estoy un poco más de 3 meses en Bolivia, viajó sin destino, sin fecha de regreso, sin itinerario y de la mano con mi intuición y con mi cámara.
El qué dirán ya no me importa, me importa lo que yo siento, lo que yo quiero y en vez de encontrar excusas me prometí a mí misma encontrar caminos (te invito a que hagas lo mismo), tuve todos los miedos que te quieras imaginar, incluso, cuando llegó el momento de despedirme de mi mamá, me temblaban las piernas.
La fotografía, ha sido mi trampolín para viajar, he trabajado con diferentes agencias de viajes en Perú y actualmente trabajo para un Magazine en Londres y sigo sustanciando procesos judiciales que llegan a mi firma, con conocimiento de causa te digo que sí se puede equilibrar tu hobby con tu profesión y siempre será una buena idea lanzarse a lo desconocido, allí sucede la magia.
A los miedos es fácil aferrarse, la pregunta es, ¿estás dispuesto a aferrarte a tus sueños? Cualquiera que tu sueño fuere, solo falta un salto de fe y los caminos se irán dibujando ante ti. Te darás cuenta.
Reflexiones varias
Considero que en el fondo de nuestro corazón y después de ciertas introspecciones, todos sabemos cuales son nuestros sueños y talentos, solo hay que armarse de valor e ir por ellos.
Tu hobby si te puede dar dinero.
Si vas a emprender un viaje largo, tus habilidades y talentos te abrirán todas las puertas que tu necesites.
Las limitaciones te las colocas tú mismo, siempre, enfócate en encontrar el camino, encontrar excusas es fácil.
Más vale arrepentirse por las cagadas que a uno lo hicieron felíz que quedarse tranquilo, sin arriesgar nada, viviendo la realidad que sueñas pero a través de otras personas.
A medida que pasa el tiempo y tus responsabilidades (de todo tipo) se incrementan, es más difícil tomar una decisión así.
Por más cliché que suene, ten la fe, confianza y responsabilidad contigo mismo de crear la realidad que te haga sentir más feliz.
Nunca olvides que creer es crear.
Gracias por leernos, hasta la próxima viajero o futuro viajero
Quedamos atentantas a tus dudas o comentarios 📬
A continuación te dejamos nuestra información de contacto.
Paula Velandia
Instagram: @sinovasnuncalosabras
Correo: paulandreavelandia@gmail.com
Galy Luna
Instagram: @galy_luna
*Artículo de coautoria, en colaboración. Escrito por: Paula Velandia y Galy Luna.
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